Ferragamo y “il dolce far niente”

Madrid – Volviendo a ejercer en su papel como una de las principales casas de moda del calendario oficial de una nueva edición de la Semana de la Moda de Milán, una condición en la que ha pasado a reforzarse en esta nueva etapa que se encuentra abriendo tras el nombramiento del británico Maximilian Davis como nuevo director creativo, la casa Ferragamo presentaba este sábado 23 de septiembre sus nuevas colecciones de hombre y mujer para la próxima temporada Primavera/Verano 2024. Unas propuestas con las que la firma ha vuelto a destacarse como todo un genuino referente de este nuevo “lujo silencioso” que empieza a amenazar con embriagar las pulsiones de los principales creativos al frente de las principales casas de moda de la industria, decididos como se muestran, entre ellos Davis, a defender los valores que todas ellas atesoran, a base de un delicadísimo y cuidadísimo “saber hacer” construido a base de ricas texturas, materiales y acabados, sabedores de que la identidad de las firmas que lideran —creativamente— se encuentra mucho más allá de logotipos y anagramas.

Partiendo de esta manera natural y propia de abrazar el mundo del diseño de moda, Davis ha presentado una colección construida como reflejo y en respuesta a esa misma naturalidad con la que históricamente la sociedad italiana ha sido capaz de, sin muestras de ningún esfuerzo, desenvolverse con una particular elegancia y distinción, que es la misma que, a día de hoy, siguen atesorando y exportando al resto de regiones del mundo bajo todo aquello que llega marcado por el sello “Made in Italy”. Una marca que es capaz de trascender de etiquetas para dar forma a una misma manera de entender y afrontar la vida, en lo que de manera tradicional se ha venido resumiendo, tanto dentro como fuera del país transalpino, en torno a la personal manera italiana de abordar las problemáticas cotidianas desde los placeres de echarse en brazos de “il dolce far niente”, o de “lo dulce de no hacer nada”. Una alegoría en favor de la despreocupación que resume las actitudes italianas ante los vaivenes del mundo, y que influye en sus mismas maneras de vestir, en lo que Davis ha encontrado un simpático paralelismo con los mismos gustos de la naturalidad sin esfuerzo que percibe que se saborean en los países caribeños. Siendo esta “fusión” de sensaciones e impresiones la que ha pasado a guiar su mano para terminar de dar forma a esta nueva colección para la próxima temporada Primavera/Verano SS24, en respuesta de tintes relajados, naturales y fluidos, construidos sobre la primorosa marca del mejor “saber hacer” italiano del que es guardiana la legendaria casa Ferragamo.

“Hay una familiaridad que he encontrado en la forma italiana de vestir y de vivir”, con “una falta de esfuerzo que se siente muy caribeña”, y que se encontraría muy relacionada con esa “idea de hacerlo todo a tu ritmo, en tu tiempo libre”, explica el mismo diseñador británico, nacido en la localidad inglesa de Manchester pero de ascendencia caribeña, a lo largo de unas declaraciones que nos hacen llegar desde la dirección de la misma casa de modas italiana. En respuesta a esas emociones, “quería que las cosas parecieran mucho más ligeras, tanto en términos de tejido como de construcción, pero también en términos de cómo la gente quiere vestirse”.

De Italia al Caribe, desnudando un “fetichismo” orgánico y fluido

Echándose así en brazos de una estética orgánica, natural y fluida, desde la que ha buscado establecer paralelismos y construir estrechos lazos de unión entre los códigos de vestimenta más propios italianos y de la región del caribe, como perfecto hilo conductor para sus pretensiones, Davis ha encontrado inspiración en el movimiento “Arte Povera” (Arte Pobre) que surgiera en Italia durante la década de los 60. Un movimiento asentado sobre el uso de materiales pobres y humildes empleados como base y como medio desde el que transmitir las intenciones del artista, y que Davis ha decidido replicar desde el ámbito de la moda en esta colección, apostando por la utilización de fibras “humildes”, como linos y algodones, trabajadas eso sí de manera primorosa y en combinación con fibras y materiales de tan alta calidad como satanes, cueros o cuentas de madera, mientras son esas mismas maestría y genialidad las que le lleva a mostrar unos satenes que han sido trabajados para reflejar la misma pátina y efecto de acabado del cuero.

Sosteniendo a la colección, y en respuesta a estos mismo motivos y a estas mismas pulsiones inspiradoras que han servido como germen para su ideación, nos encontramos con una paleta cromática dominada por tonalidades neutras y terrosas, a base de blancos, negros, beige, grises, marrones chocolates y topos, a las que se encargan de poner su justo contrapunto tropicales verdes bosques y azules turquesas y el ya propio “rojo Ferragamo” que ha pasado a convertirse en el color corporativo de la marca en esta nueva etapa con Maximilian Davis como director creativo. Siendo este mismo el espectro cromático que así pues encontraremos dando forma al conjunto de piezas tanto masculinas como femeninas que integran esta colección de Ferragamo para la temporada Primavera/Verano SS24, y de entre las cuales a bien que podemos destacar desde los exquisitos trajes sastre, de líneas contemporáneas y fluidas, que se encargaron de abrir el desfile, hasta las combinaciones en verde bosque y efecto en acabado cuero que nos trasladan hasta lo más profundo de una selva tropical, los pictóricos vestidos túnica de líneas fluidas, los veraniegos —e igualmente tropicales— vestidos estampados de corte cóctel, o los originalísimos vestido y complementos hechos de cuentas de madera. Piezas todas ellas a las que, junto a los nuevos lanzamientos de bolsos y calzado, se encargó de poner el broche de oro un vestido negro con corpiño de cuero Spazzolato con aberturas y acabado efecto brillo, que parecía llegar para devolver la sensación de un busto construido como con un gran coco pulido y lustroso.

“Quería que las prendas parecieran puras y honestas, que la colección fuera relacionable con un armario, pero interesante por el tacto de la mano”, detalla Devis, poniendo especial atención así en el cuidado universo de texturas, materiales y acabados del que ha tratado de dotar a esta nueva propuestas creada para Ferragamo. Una colección sobre la cual, añade el diseñador británico, ha vuelto a procurar verter parte de su propia personalidad más íntima, y en particular su gusto por combinar las piezas de diario con referentes muy sexualizados y de manera conservadora y tradicional relegados a las ámbitos de la intimidad, en lo que particularmente se ha puesto de manifiesto en el marco de esta colección en los vestidos de día combinados zapatos en acabado charol, en las cuidas aberturas “cut out” o en el uso de apliques metálico y en cuero. “El fetichismo es algo que está presente en el AD de mi trabajo”, puntualiza a este respecto el diseñador, al tiempo que destaca cómo “hay algo moderno en incorporar eso a tu vida cotidiana y a tu vestuario de diario”.