Rihanna gana batalla legal contra la cadena británica Topshop

La cantante Rihanna ha ganado su batalla legal contra Topshop por haber usado su imagen en una camiseta sin su permiso. La Corte de Apelaciones de Londres desestimó así el recurso presentado por la cadena británica, que quería que se anulara una decisión de 2013 del Tribunal Superior que declaraba que la empresa había vulnerado los derechos de imagen de la artista.

La decisión de la Corte obliga a Topshop a dejar de vender la camiseta que ha originado el conflicto. Los jueces explicaron en su dictamen que aunque los famosos no tienen el control general de todas las reproducciones de su imagen a escala global, en este caso la cantante y diseñadora fue perjudicada porque representa a una marca rival, River Island.

El fin de un largo camino

Los abogados de Topshop, propiedad de Philip Green y para los que ha diseñado la modelo Kate Moss, habían argumentado que el empleo de la imagen de Rihanna equivalía al que se hace de otros famosos como Jimi Hendrix o Elvis Presley, y la gente no suele pensar que estos han dado autorización.

Tras sopesar los argumentos de ambas partes, los tres jueces de la Corte de Apelaciones decidieron que, en este caso, Rihanna tenía derecho a reclamar daños al amparo de un concepto legal que permite ejercer control sobre una marca aunque esta no haya sido legalmente registrada como tal, en este caso su propia imagen.

La prenda en cuestión se trataba de una camiseta sin mangas que se puso a la venta en 2013 por un precio de 22 libras y mostraba el rostro de Rihanna. Ni la artista ni su equipo autorizaron el uso y estampación de aquella fotografía con fines comerciales, por lo que decidieron llevar el caso a juicio y ganó. En 2014 Arcadia Group, propietartio de Topshop decidió apelar el fallo judicial pero una vez más la razón estuvo del lado de la cantante. Es la primera vez que un famoso gana un caso de estas características en el Reino Unido. Foto: La camiseta de la polémica